Rafael Nadal remontó para llevarse una sufrida victoria por 4-6, 6-3, 6-4 frente al belga Zizou Bergs, un desconocido que venía de superar la fase clasificatoria del Masters 1000 de Roma y con ello avanzó a la segunda ronda.
Fue el décimo partido de Nadal este año, luego de perderse casi todo 2023 por una lesión en la cadera que precisó una cirugía. Su objetivo es llegar en la mejor forma posible para al torneo de Roland Garros, donde es el dueño del récord con 14 títulos.
Por momentos Nadal manifestó el peso de sus 37 años y de sus lesiones sobre la cancha del Foro Itálico donde podría ser su última presencia.
Sin poder generar ritmo con la derecha o el revés, acumulando muchísimos errores no forzados e incapaz de sostenerse en los peloteos, Nadal cedió el set inicial de su partido.
Pero la versión avasalladora del campeón de 22 torneos de Grand Slam, el jugador que es virtualmente indomable en la arcilla, emergió.
“No ha sido mi mejor partido. Había estado mejor en los entrenamientos, pero he encontrado la manera de ganar, eso es muy importante para mí al inicio del torneo”, declaró Nadal.
“Como vengo diciendo, mi juego es más imprevisible que antes. Pero no he jugado mucho tenis en estos dos últimos años, así que es normal que aparezcan algunos altibajos», añadió. Estoy seguro de que puedo hacerlo mucho mejor y ojalá pueda hacerlo en la siguiente ronda”.
Roma, donde ostenta el récord con 10 títulos, será la última gran prueba de Nadal con miras a Roland Garros, cuya actividad en el cuadro principal arrancará el 26 de mayo.